Javier Castro
Flórez en Facebook, 5-XII-2012
No conozco a José Luis Melero Rivas. No sé que voz tiene o si es de café con leche o lo toma solo. Si es alto o bajo o de esos que no son altos ni bajos, lo ignoro. No puedo afirmar tampoco que sea hombre taciturno o que tire a risueño, aunque imagino que es más de este segundo barrio. En fin, dado que es hombre muy bien asentado en su Zaragoza y yo ando muy arrecogido aquí en Murcia nos separan no sé cuantos cientos de kilómetros con sus desiertos por medio por lo que nunca he estado cerca de ver el pelaje de este hombre. Ni siquiera he intercambiado con él ningun mail, carta certificada, llamada de teléfono, sms, whatshapp, mensaje en paloma mensajera, toques de morse o comunicación a través de la ouija. Y sin embargo cuando tengo frente a mí sus dos libros maravillosos me parece tenerle delante y -esto sí que es paranormal y cosa de cuarto milenio- siento sus risas y me parece que lo conociera todo de él: su voz no escuchada, su estampa caminando a casa con un libro en el bolsillo de la chaqueta deseando llegar al sillón y al calorcito para ponerse a disfrutarlo... En fin que es como de la familia y dan ganas de invitarle a cañas y si se terciara a gin tonic. Gran cosa esto de los libros...
|